guiado por las apariencias

11/10/08

Pastel de cumpleaños.

Bueno, vamos a ponernos pastel de verdad.

Acabo de llegar a casa, hoy era el cumpleaños del Javi (felicidades monstruo), he dejado colgada a la Patri (lo siento reina).

No llevo una semana muy boyante, sobre todo por una cosa, la más importante: no he escrito bien. Cargo con demasiada angustia, el tiempo me da muchísima angustia, cuando la cosa no va fluida siempre pienso que no estoy trabajando (de hecho, cuando la cosa no va fluida, trabajo mucho menos), entonces creo que nunca llegaré a hacer nada…

Mientras venía a casa he visto a una pareja besándose, debía de ser uno de los primeros besos porque lo hacían con ilusión y con cuidado.

Lo único bueno es haber empezado la Crónica del pájaro que da cuerda al Mundo. Leyendo libros como éste se aprende a escribir. Por otro lado, aunque no me salgan los folios, sí siento que Dina va creciendo en mi interior, cada vez la veo más y pienso más tiempo en ella…

Hoy, el mismo día que el cumpleaños del Javi, ha sido el cumpleaños de mi abuela. Mi tía abuela ha traído una poesía a mi madre que ella escribió en 1966. Era una cría.


LA LUZ

No me reproches

si no sigo derechos los senderos

si no escojo aquel que más debiera

si me escapo por otros más estrechos.

Esto que digo, es poco

pero ¡ay! si tu supieras lo que siento.

Te aseguro que son muchas las furias

que me corren por dentro.

¡Pobres criaturas mías!

¡Pobres alumbramientos!

¡Qué tragedia no poder explicarte

lo que siento por dentro!

¡Qué angustia de mordiscos rabiosos

que me roen el alma!

¡Qué dolor de patadas furiosas

que me parten el cuerpo!

¡Quieren salir quieren ir hacia el mundo

bien los siento!

¡Como me cuesta un poco

de este ser que les presto!

Esto que digo es poco

pero ¡ay! si tu supieras lo que llevo por dentro

si vieras como me pesan

en mi ser parturiento.

No me reproches nada

que me están consumiendo,

que me beben la sangre,

que me comen el cuerpo.

Ayúdame a sacarlos de mi alma.

Adivina mis pobres sentimientos

que estoy cansada de llevarlos siempre

que estoy vencida de su duro peso

que voy a enloquecerme

de tantas amarguras

de tantos ideales

de tantas esperanzas

de tantos sueños muertos…

Ya se, ya se que es poco lo que grita mi boca

pero ¡ay! si tu supieras lo que llevo por dentro.



Y esta es mía:


No todo vuelve.

Vuelven luces

vuelven días

vuelven penas

vuelven risas

vuelve el puñal de todas las desdichas

vuelve el pelo suave que salva a los nocturnos

vuelve el terror disfrazado con tres máscaras

vuelve el infierno del cazador de melancolías

vuelve la violencia que deshace las infancias.

Pero el amor de una vida no vuelve,

porque yo soy uno, no soy cosmos;

muerto seré parte de una rueda,

muriendo soy un ganso migratorio.


Con las letras de FIN en tu pisada,

en ESA pisada.

Una gran pisada para la princesa,

una pisada eterna para el niño perdido.


Volverá la risa,

ya ha vuelto.

Pero suena a otro metal más herrumbroso.


La Espera es una Espera que no es nada, que sólo es amistad, pasar el tiempo, un cubo blanco, una antesala, siempre siniestro, ilusión sin alas, aun mejor, aun más romántico, fuerte por siempre, yo sé lo que sé, lo sé y sé que no estoy loco. Sólo tengo lo que sé, porque en la vida sólo hay una cosa: Lo que sea.


Pues ala, no os quejéis que ya avisé al principio.

Besos.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Germán, hace mucho que no te leo. Lo siento, ando liadillo y no tengo tiempo de leer cosas en la red, solo leo papeles de proyectos, estoy hasta los güevos... He leido la última y jo tío, fóleos... es con i. Sin acritud, ya sabes que es constructivo.
Un abrazo